agosto 18, 2010

Los múltiples caminos de la exposición, mi relación con la red


Estos días he estado ordenando mi vida digital, que es de una u otra forma tan dinámica como mi vida social. Ya no es extraño ni me hace un inadaptado social confesar esto y no es una locura el contar tu vida en un blog como lo es Biotopo del Marciano. En otras ocasiones ya he comentado los motivos por los cuales escribo, sus cambios de apariencia y su vinculación con las otras redes sociales (fb, twitter, etc...) Últimamente estoy tratando de incorporarle un link a grooveshark para compartir más fructiferamente música, de esa que tanto me ha servido estos días calmando mi bestia interior. (las bromas. Aparte)

Esto me recuerda las divagaciones y conversaciones que con más de alguien he tenido de los motivos que me hacen exponerme, exponerme a un mundo que ya es muy público, en que el espacio privado es una ilusión de identidad que nos generamos para no sentirnos desnudos ante el resto, ya que gran parte de lo que hacemos, pensamos, escribimos u opinamos es “comentado” o más frontalmente pelado por nuestros cercanos (y por los no tan cercanos también). Entonces las múltiples redes en las que comparto información no son más que eso: Redes. Redes en el amplio sentido de la palabra, aunque sin caer en la conceptualización futura de la web semántica o 3.0, si no que en árboles de conocimientos centrados en nosotros.



Cuando me dicen que me expongo innecesariamente al contar mi vida en mi blog, al saturar facebook con mis estados o inundar ciertos momentos algunos timeline me siento en parte ofendido, ya que si me tienen en una red, se detienen a leerme o me agregan a su timeline es con el riesgo de saber más de mi, en algunos casos, incluso a saber cuando estoy en el baño o cuando estoy viendo porno, cosas que a la sociedad chilena les cuesta muchísimo reconocer pero que hacemos sin más reparos.

Entonces, mi polifacética vida digital toma un sentido moralizante, construyendo un ejemplo de sinceridad poco habitual y no como varios me han descrito “un niñito falto de atención”. Hace unas semanas descubrí que atención me sobra y como converse con Else, a pesar de tener todas las condiciones para estar sólo y desamparado me construyo estas redes para no hacerlo y quienes viven con sus familias, no les falta que comer, tienen amplios entornos sociales viven más soledad, incomprensión y falta de atención que la que tengo yo. Ahí es donde Else comento que yo me rodeo de gente muy sola, lo que es muy cierto. 

 

La soledad es una de las pandemias sociales que al hombre gregario le ha sido casi imposible erradicar y que estas redes sociales permiten disminuir un poco. Si hubiese vivido en otro tiempo es muy probable que fuese una persona muy sola y aún más des adaptada, con reales carencias de afecto y socialización, pero no, las redes me abrieron de pequeño un mundo diferente y permiten hacer una movilidad social para quienes a pesar de encajar en el arquetipo de extraños, raros e incluso marcianos por nuestras actitudes podemos ahora construir una esfera social más grande de la que podemos manejar.

Son tan sólo los múltiples caminos de la exposición, que muestran las caras de una esfera que no tiene suficientes planos tangentes como para poder comprenderla en todas sus dimensiones...

1 comentario:

  1. Yo no sé pa qué somos gregarios, o dicho de otro modo, por qué es tan difícil ser solo. Necesito un grupo para hacer los trabajos de la U, necesito congeniar con los demás de mi lab, necesito pedir ayuda para algunas cosas y no puedo si no somos conocidos... no sé. Si quiero ser sola, entonces tengo que independizarme completamente del mundo, y no sçe si eso sea posible u%u

    ResponderBorrar

el constructivismo utópico, la épica delirante

 Porque dejar que las cosas buenas se vayan. O quizás, es tiempo de regresar al texto. 

Hackear el marciano

Hackear el marciano