septiembre 09, 2012

El espiritu


Si les contará de los chakras, las conversaciones espirituales, los viajes astrales y los misteriosos sucesos que ocurren entre Patricia, Carlos, Ignacio, David, Cristóbal y yo desde Abril pasado no nos creerían a ninguno. Y eso es porque la cultura ha desechado de la tradición sus concepciones espirituales y energéticas de las cosas. Esos sucesos que ocurren más allá de lo materia y que requieren un ojo agudo para ver más allá de lo aparente. Conversaciones como las que he tenido con Daniel también. Símbolos y señales que la naturaleza da. Patones en el clima, en las noches y los movimientos, patrones en las personas que hay que mirar y escuchar o más bien hay que observar y oír.

En mi última conversación en persona con Ángel hablamos un poco de los vínculos extrasensoriales que nos conectan, comunican, acercan. Vinculos que él tiene mayor consciencia que yo, pero porque mi opción consciente es no ser consciente y lo que es claro, mi opción espiritual es no encontrarme aún. ¿Porque no encontrarse? Y ¿como no hacerlo, si andamos siempre con nosotros mismos? Simple, escapando. Escapando de mi mismo en los pasos, las palabras, en los momentos, las ideas, escapando de las verdades que conocemos inevitables (como dice Touya de Sakura) y simplemente actuando con ese instinto sabio que nos impulsa a hacer o no las cosas.

Lo cierto que este semestre ha tenido varios componentes distintos. Uno de ellos es la conciencia de mi espíritu nuevamente, de sus vibraciones y sentimientos, de esas cosas que no solo laten, si no que hacen latir a mi corazón. Se lo he compartido un poco a Matisepu, intente de poner el tema con Jonás, pero lo cierto es que la estructuración y racionalidad permite pocas instancias para esto. Solo con Margarita, la Profe Margarita he podido conversar de angeles y ojos, de visión y pasión.

Y con el primer grupo nombrado, solo buscamos las herramientas para lo que viene. Las herramientas que tenemos todos ya en algún lado muy cercano y que vienen.

Y mi facultad está sobre un nodo. Para variar, las cosas se abren cuando las almas vibran. Y hacía tiempo que no vibraban las almas en ese lugar como hoy lo están haciendo ¿Porque? El tiempo lo hará saber.  

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