mayo 26, 2012

Recientes Noches Marcianas



Mientras de día intentaba sacar ideas para mi anteproyecto de tesis (APT) y la política de sustentabilidad(PSU) universitaria que presento en unos días, en la noche pasaban cosas distintas. Mayo no ha sido un mes que me encante. Me he ordenado más, pero no me cunden los días como quiero. Por ello, la noche, se ha vuelto un refugio para poder hacer las más diversas cosas postergadas, para poder reencontrarme con personas.


El miercoles en la noche decidí quedarme en la facultad hasta terminar el draft del anteproyecto de tesis. Usando BioChemDraw revisando bibliografía como loco, termine de armar (incluyendo la mala traducción de uno de los puntos) el Draft 2 del anteproyecto. Mi proscatinadora y digital alma tuiteaba entre parrafo y parrafo logrado, lo que me mantuvo poco concentrado. Pero en eso @sarake me escribe que me quiere ver. Ya hace unas semanas habíamos postergado una junta por diversos motivos, pero ahora dijo que me quería acompañar mientras hacía el APT.

Cuando peleaba con los mecanismos a dibujar llego. Dio en su auto varias vueltas por Olivos, mientras yo me encontraba solo en el edificio, quienes eran los únicos que sabían de mi presencia exacta allí. Sara no quizo pasar (los guardias miraban muy feo) y por tuiter cache cuando llego (20 min despues de ello) Me puse las pilas a full y aunque termine apurado, a eso de la 1.15 del jueves sali corriendo de la facultad para verla. Esperaba en el auto, viendo cosas en su computador. Le propuse comer la hamburguesa que me compro y que tenía hasta huevo :3 en mi casa. Partimos a las faldas del San Cristobal poniendonos al día en cosas. Compartimos en la conversación sobre música de series, de nuestro adiccional gusto a Buffy, aprendí de zoología y de sus actuales pegas laboratoristicas. Me hizo un café con mucho talento e incluso puso wifi unos minutos en mi casa con su celular... Se fue antes del amanecer, para evitar el taco.


El jueves la noche llego mientras caminaba desde la FECH a Vicuña a tomar la prueba de Historia de la Química. Me toco tomar la prueba a los alumnos del curso, que no fue lunes (en hora de clases) debido al feriado. A medida que terminaban, les corregía. Termine a eso de las 20:15 de corregir. Luego me fui al cumpleaños de @felipefromChile, invitación grata y a la vez sorpresiva. La cita fue en “El origen”. Al llegar me toco presentarme. Toda gente profesional y a pesar de estar con mucho sueño me quede hasta casi la 1 experenciando una ceremonia del té que se hizó en honor del cumpleañero. Converse con otra de las personas que fue sin acompañante un buen rato, la Cony. Aunque el sueño me puso mucho más fome de lo que soy, fue una buena conversación Comida, cariño, buena onda y gran diversidad de personas. Gente relacionada a la salud del cuerpo o del alma eran (a modo general) los invitados de Felipe. Me fui caminando desde allí hasta casa. Quería sentir el viento nocturno en mi rostro, los ruidos de la ciudad y su espiríru correr por los pasajes, entre los árboles y los edificios cuando la gente duerme...

El viernes llegue a la medianoche donde @3d0. Ninguno de los dos tuvo tiempo antes. Vi como jugaba Team4Trees 2 con su Tama online. Los zombis del juego lo perseguian, escupían, golpeaban y atacaban. Cambio la disposición de su habitación desde la última vez que fui para allá. Nueva tele distinta cama y un Eduardo cada vez más adulto, pero feliz al fin y al cabo. Me sirvio comida el buen Eduardo con ese talento culinario que solo el tiene ante la comida hogareña para que parezca perfecta por más enfriada que este. Vimos (yo por primera vez, el nuevamente) el final de House. M.D. Hace ya seis años que veía en paralelo a él la serie y la conversabamos. Ocho años viendola significo ver el paso de 3d0 desde un wilson interno a un House Externo, aunque el diga que no es así. De verdad que extrañaba a Edo y verlo me hace más feliz. Me desahogue con varias cosas que solo me sale decirle a Edo y le conte de @matisepu. La vida es ciclica.

Las noches marcianas hacia tiempo no estaban. Madrugadas sociales, tiempos de excepción, toques de queda a la laboralidad y dejar correr, mientras los humanos duermen, dejar correr la mente marciana en los mundos de la fantasia, lo mágico y lo intimo.  Y una ciudad... Una ciudad en tonos azules, violetas y naranjas...

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 Porque dejar que las cosas buenas se vayan. O quizás, es tiempo de regresar al texto. 

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