Día de marcha

Hoy fue el día de la marcha. Me levante a las 7 am, con el cielo gris y la mochila al hombro dispuesto a todo. Me fui caminando desde el cerro, con las zapatillas azules y urbanas y sintiendo el aroma de la lluvia venir. Pasos más, pasos menos, yo corriendo por Avenida Recoleta y cruzando con luz roja entre medio de los autos. Pasos más, pasos menos, yo saltando por los pórticos de ladrillo de un costado del cementerio general. Cuando ya andaba doblando por Sergio Livingtone me detuve y compre el diario. No eran más de las ocho y la portada sobre el final de mundos opuestos me llamo y me dijo “Aquí hay contenido basura” No pude resistir gastar $250 pesos en él.

En la facultad no habían más de 4 autos estacionados dentro. La cancha: vacía y el Ricoffee estaba abriendo. Subí al Cerutti y corrí los uno, dos, tres pisos hasta llegar a la puerta del laboratorio. Recordé “Hoy gano paro” y me autoexplique mentalmente muchas cosas. Al llegar al laboratorio no había nadie. Y me dispuse a leer el correo, las noticias y buscar papers. Mientras eso hacia, el profe llego, algo más temprano de lo habitual.

Me dedique a trabajar en el informe del magíster. Hice un punteo y avance en las cosas más impensadas. Tome nota de los papers que quería, me puse a explorar más y más. Ahora, con los grandes audífonos, soy capaz de separarme del lab y tratar de encerrarme en el trabajo. Al menos siento que esta semana las cosas algo han avanzado, no así en dos meses.

Llego el Dr. Seba Miranda y se puso a conversar con el Profe. Mientras yo leía un paper sobre la NiFe transferasa y un apunte de QM/MM para el informe. Ellos hablaban de mundos opuestos, de psíquicos, de The HUM (un poco por culpa mía) y de las injusticias de la Chile y una situación en la piscina universitaria que le paso al Prof. Gerald (quien va hace más de 20 años allí). Luego de eso terminé de preparar las moléculas para el docking. Eran casi las 11 y le dije al profe “Me tengo que ir”. Me miro con la cara de -hasta cuando- pero me deseo muy buen día. Salí pensando que mi profe es una persona muy paciente y salí corriendo hacia el sur de la ciudad.

Me decidí a irme a la marcha, que no tenía considerada dentro de mis prioridades del día. Me fui caminando cuando recibí un mensaje de “Vamos frente a casa central”. No recuerdo de quien era el mensaje, pero me hizo dirigirme hacia ese punto. Me fui caminando. Corrí desde Olivos hasta Mapocho, esquivando señoras y mangas de tela. Cruce frente a una patrulla que iba a muy baja velocidad y aquí (imagine la escena conmigo) corrí mochila en la espalda por sobre el Puente Cal y Canto mientras las palomas volaban para que no las pillará con mis pasos. Llegue a Bandera y luego me fui caminando por las cuadras del centro hasta visualizar la columna de personas, los gritos y las pancartas.

Cuando llegue allá cruce por entre las rejas que separaban la marcha de la gente que no marchaba. Dos guanacos, muchas rejas papales y un contingente de carabineros muy ordenado que impedían el paso hacia Ahumada. Una membrana verde selectiva y arisca que solo nos dejaba pasar a quienes queríamos ir a la marcha. (Y no quienes querían irse de la marcha) Entre y varios pacos me miraron con cara de comida para luego empezar a preguntar ¿Donde anda Química?. Me acerque a la altura del Hotel San Francisco y miré a lo lejos una gran columna de gente, lienzos y saltos. Y no, no veía a Química :(

Me encontré con los periodistas @adesalambrar y @sboric y me dijeron que venía atrás. Yo solo seguí mirando y esperando. Vi como estallo un conflicto con carabineros en Estado y la gente entraba y salida. Se acumulaba una masa homogénea y los gases se disparaban sin disiparlos. Letreros y carteles a piso. La gente corría y volvía. Se sintió algo de miedo que la represión cayera sobre toda la columna. Luego vi a Química frente a mi.

Max, Feña, Javy, Raúl y David. Varios otros, sin cajas está vez por una nubosidad amenazante marchando nuevamente por una educación Publica, gratuita y de Calidad. Pasé junto con ellos hasta la Casa Central. Caminamos como compañeros que nos vemos en ramos, almuerzos, ayudantías, asados y otras tantas cosas más. Seguimos a pasa firme mientras estallaban por el frente y por detrás otros focos de conflicto y gritamos

“Ce ache i, CHI, Ele e, LE, CHI CHI CHI, LE LE LE, UNIVERSIDAD DE CHILE! LIBRE Y GRATIS!. SIN LOS PACOS! LIBRE CONCHETUMARE`! CON EL PEDA, LIBRE CONCHETUMARE` UNICA SOLUCIÓN REVOLUCIÓN. REVOLUCIÖN.

Seguimos hasta que cruzamos por frente a la Moneda. La marcha era atacada por múltiples flancos. Creo que aquí tuitie desde un celular que andaba en la marcha. Me encontré con el Profe Julio De la Fuente, un profe aperrado y consecuente. Y como siempre este fisicoquímico iba sacando fotos de todo. Luego me distraje (como buen marciano) y me puse a buscar gente para saludar. Pillé al Senador Electo Montenegro (Yerko! :3) y luego con Piga, Maringer, Fonseca, Lais y quien puede ser considerada mi mejor amiga rica, Javiera Born. Nos fuimos un muy buen rato caminando con Piga y conversando. Afa nos inmortalizo en una foto de marcha de primer nivel y luego, cuando la columna se reflejaba hacia Av. España (creo) seguimos conversando. Casi al llegar a Blanco nos desviamos con la Javy. Ella tenía unas cosas que hacer en su depto, del cual se cambio hace unas semanas. Yo tenía que irme al Senado Universitario.

Y así fue. Tuve que tomar un taxi (que no pasaba nunca y caminaba, caminaba por Toesca, por Gay y por Santa Isabel, por el parque Cousiño y sentía que la ciudad me tragaba mientras andaba atrasado) Tome taxi y logre llegar a donde tenía que ir. Un almuerzo con Richard (Richita pa los amigos) donde fuimos a ponernos al día y a intercambiar visiones y noticias. Una muy buena picada en barrio Paris-Londres donde poder refugiarnos de los gases aún presentes en la atmósfera y un entretenido almuerzo.

A las 15:00 horas, luego de este almuerzo fui a la Casa Central. No teníamos plenaria pero si reunión con los Senadores Electos y Antiguos estudiantiles. Llego Irací, Scarlett y Ariel. Esperamos y esperamos. Llamaba Marisol Prado preguntando que tal casa central y que iría para allá. Nosotros llamabamos a los Senadores y nadie venía. Loreto y Yerko encerrados en Beucheff, Leyla en Huecuraba tomando el metro, Sebastian con asuntos del CED post-marcha y los viejos que no podrían llegar. Todo falló. Decidimos cancelar la reunión.

Luego me quede con Ariel que me llevo a la galería a un costa de Arturo Prat, una callecita donde vendían té, café y chocolate. Creo que tomé un chocolate. Y conversamos algo más de una hora de diversos hechos y anécdotas. El hacia sus cigarros y cada tanto fumaba otro. Yo me agarraba firme de la taza con chocolate. Pago Ariel. Luego el se fue a hacer un trabajo y yo a la FECH en busca de datos del día para saber en que termino todo.

Esa noche para variar, no vi las noticias. Pero tenía ganas de hacerlo. Quería ver que decían del asedio que recibimos los estudiantes.