octubre 22, 2011

Al final de los veintidos

Los 22 han sido un años con mas arte y más juegos de rol. He ido más al teatro, escuchado mejores discos, leído pocos libros, pero muchas citas, estudiado cosas más diversas, estudiado menos por un paro, una practica y un serious bussiness de cargo estudiantil. He tenido el orgullo de vivir grandes momentos roleros con LODMEC.  Ha sido un año más explosivo, inesperado, incierto, pero de grandes aprendizajes. Volví a hacer clases en serio y me hace sentir lleno. También obtuve mi mejor promedio en un semestre universitario teniendo 22. He liberado varios secretos, conectado varios cabos sueltos y haciendo menos pesada mi mochila en cuanto a carga emocional. Comido cosas más ricas, cafés más sabrosos y visto colores más vistosos. Creo que sirvo para varias más cosas de las que me imagine, pero sólo una me hincha completamente el corazón. También ando a dos bandos en los blogs, entre este y La Ciudad Atómica, tratando de hacer la ciencia algo más cercano con grandes chicos. Dormí poco, estos 365 días he dormido menos que en cualquiera de mis años anteriores... Carretie más también, más juntas y fiestas, más noches en vela conversando y me he reencontrado con muchas valiosas personas. Pero me siento bien, feliz, quizás un poco más maduro, pero lleno de azúcar =D Y con muchas cosas que enseñar y muchas muchas más que deseo aprender. Me agrada estar aprendiendo a blandir una espada sin matarme y a como autocuidarme mejor.  Aún estoy con la bala pasada de irme a Buenos Aires unos días este año 2011, pensé que lo haría antes de los 23, creo que no podré y me da pena no haberlo hecho, como tampoco haber leído a la generación perdida. Quiero nadar más seguido, quizás como lo hacía a los 21. Son pendientes que tengo para mis próximos días. Siento que tengo más colores hoy que ayer, más esquinas, más bordes, como que soy más complejo y más claro con mis posiciones y pensamientos. Me siento una mejor persona :) Tal como Rosa y Patricia hubiesen querido. I am a martian warrior. 

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